miércoles, 14 de diciembre de 2016

María Rosa de Luna, curandera en San José de Gracia, Aguascalientes, 1782.

Xavier A. López y de la Peña.
En septiembre de 1782 quien ejercía en el pueblo de San José de Gracia, Ags., el oficio de Cirujano, era una mujer llamada María Rosa de Luna, según declaración en una causa criminal contra Juan José Leandro, indio del mismo pueblo, por haber azotado a su mujer a quien mató de dichos azotes. Dice así el dictamen:
“…presente y ante mí (D. Manuel de Santa-Ana, Teniente de Alcalde Mayor) María Rosa de Luna quien hizo oficio de Cirujano en la inspección que se hizo en el cuerpo de María Bernardina sobre los azotes que le dio su marido Juan José Leandro: presentes los de mi asistencia, le recibí juramento… bajo cuyo cargo ofreció decir verdad según su leal saber y entender en lo que supiere y fuere preguntada, y siéndolo sobre los referidos azotes y si por sólo eso pudiera haber muerto la susodicha Bernardina, dijo: que habiendo sacado el cuerpo del ataúd y quitádole la mortaja y le alzó las naguas de encima y las blancas y unas y otras las tenía pegadas de la sentura hasta las corvas las que habiéndolselas despegado juntamente con las faldas de la camisa le halló la mayor parte de adonde tenía pegadas las naguas blancas desollado, y adonde no tenía desollado tenía unas vejigas mui negras y por todo el círculo de lo desollado mui renegrido que al parecer estaba acancerado y en el muslo y nalga del lado derecho tenía sesuras ondas donde se infiere remataba la cuarta, y demás de esto las partes y piernas donde no tenía azotes tenía inchado y regegrido, y que no tenía otra señal ni golpe no erida en otra parte del cuerpo más que de en los lagartos de los brazos señales moradas de las que se infiere la amarrarían o colgarían y que según su poca inteligencia le parece ser suficiente según la fetidez y color denegrido, que en el término de ocho días le pudo haber entrado calentura y acancerándose y ser causa bastante para morir por no haberse curado en tiempo…”

lunes, 7 de noviembre de 2016

Curioso formato de licencia emitida por el Protomedicato.

Por siglos, la influencia del médico griego Hipócrates de Cos (c. 460 a.n.e. - c. 370 a.n.e.) considerado generalmente en occidente como el padre de la medicina, permeó en la práctica de esta profesión siguiendo a pie juntillas lo expresado en sus célebres aforismos como queda demostrado en el siguiente:
Formato de Licencia expedida por el Protomedicato, para expulsar sin restricciones las flatulencias. Impreso en el año de 1770:
Xavier A. López y de la Peña
NOS EL DOCTOR DON PEDRO DE ALVA, CATHEDRATICO DE PRIMA DE LA UNIVERSIDAD DE ALCALá, MEDICO DE CAMARA DE S. MAG. Y DE SU REAL PROTO, MEDICATO, &. Por quanto nos ha hecho reprefentacion______________________________________que padece dolores de hijada, con aparatos flatulentos, acreas morbofidades, y epileptos achaques; por lo qual es en riefgo de fu vida el retener la ventofedad, verificandofe en eftos cafos el Aphorismo de nueftro Hipócrates: Si ventofitas retinetur, retinens morietur, & ideo excludetur. Por tanto, por la prefente, y por la autoridad de la Junta de Pragmaticas, y Cortefias de eftos Reinos, que en parte gozamos, damos licencia a dicho _____________________________________________ para que en cualquier ocafion, y tiempo, corserfo, y progreffo, delante de cualquier perfona, o perfonas, de cualquier eftado, y condicion que fean, puedan defpedir dichas ventofedades por abaxo, y por arriva, fin nota en la urbanidad, ni falta en la política; con condición, que hayan defer con eftrepito, por contravenirfe en lo contrario a efta nueftra facultad Real. Y declaramos, que por efta nueftra facultad, y licencia no fe les prohíbe a los oyentes decir lo de cuerno, y febo, el diablo meta el dedo, & con las demás pullas acoftumbradas, Dada en nuestro Proto Medicato de Madrid, firmada de nueftro nombre, y fellada con el fello de nueftro Oficio en _____ días del mes de __________ de mil fetecintos y fetenta y_____. Dn Pedro de Alba (rúbrica).

miércoles, 5 de octubre de 2016

Matrimonio del Dr. Valentín Gómez Farías. Aguascalientes, 1817.

Xavier A. López y de la Peña
El ilustre forjador de la Reforma liberal, Dr. Valentín Gómez Farías, contrajo matrimonio en la Villa de Aguascalientes el día 4 de octubre de 1817. Este acontecimiento quedó registrado en el Libro número 22 de Matrimonios. Folio 193, frente y vuelta, de la siguiente manera:
En la Villa de Aguascalientes en quatro del mes de Octe de mil ochocientos diez y siete años; yo FR. MANUEL DE SANTIAGO Comendador del Convento de Nuestra Sra. De la Merced Casé (V. P.) en esta Villa a Dn Valentín Gomez Español, Soltero, originario de la ciudad de Guadalajara, vecino de esta siete años hace; residió en la Capital de México practicando de facultad, un año tres mes y después de siete años de sitado en esta volvió a residir en aquella capital el tiempo de seis meses, con el fin de restablecer su salud, e ilustrarse más en la Medicina; de tránsito para dicha ciudad, residió en la de San Luis quatro meses a causa de habérsele ofrecido varias curaciones; hijo legítimo de Dn Lugardo Gomez, y de Da María Josefa Martínez Difna.: con Da Ysabel Lopez, Espla doncella, originaria y veca de esta Villa, hija legítima de Dn Mariano López difto. Y Da Guadalupe Padilla. Se les dispensaron las Proclamas por el Exmo. E Illmo. Sr. Obispo Diocesano Dor Dn Juan Cruz Ruiz de Cabañas, como consta en su despacho, expedido en la ciudad de Guadalajara el siete del pasado mes de Sept. Del corriente año: yo dicho Comendador les di las bendiciones nupciales y velé en el Camarín de la Purísima Concepción, que ya se haya contiguo al Convto. De S. Diego, su fecha once del corriente mes; fueron Padrinos Dn Juan Angel Díaz, y Da Ygnacia Lopez, y testigos el Licenciado Dn Agustin Conde, y Dn Pedro Anto Gutz y para que conste lo firme. José Ma. Berrueco.

miércoles, 14 de septiembre de 2016

Curación milagrosa en Aguascalientes, 1694.

Xavier A. López y de la Peña
En la obra:
Origen de los célebres santuarios de la Nueva Galicia Obispado de Guadalaxara en la América Septentrional. Por el padre Francisco de Florencia de la Compañía de Jesús. México, Imprenta de Juan Joseph Guillena Carrafcofo. Año de 1694.
Se registra el hecho de una “Curación milagrosa” de la siguiente manera:
“En la Villa de Aguascalientes un niño de edad de un año, se tragó un Real de aquatro: atravesósele en la garganta, y lo tuvo atravesado más de una hora, sin podérsele sacar. Llamó a la Virgen su Madre, y estando ya casi muerto de ahogado con un golpe en las espaldas, que lo que parece lo inspiró la Virgen, lo echó y quedó libre. Y fue la Madre con el niño a dar gracias. Y dice este testigo, que deja otros innumerables, porque no tienen especiales circunstancias, y se ratificó en lo dicho; y lo juró, y firmó &c. Y declara ser de quarenta y ocho años”.

viernes, 12 de agosto de 2016

El hospital juanino de Aguascalientes daba asistencia a militares. 1819.

El hospital de San Juan de Dios en Aguascalientes cubría ciertas funciones correspondientes a un hospital militar.
Xavier A. López y de la Peña
El señor Isidoro Tejada, Subdelegado de Aguascalientes, en un informe enviado al Intendente de Zacatecas en marzo de 1819 le comunica lo siguiente:
“... debo informar a V.S. que en esta Villa no hay Hospital Militar y sólo el de San Juan de Dios en donde se recibe a toda clase de individuos enfermos hasta el número que permiten tres salas, en donde se les asiste con alimentos comunes y medicinas que se les franquean de una Botica que tiene el mismo Convento. Sólo hay ocho camas dotadas con los réditos de unas fincas que dejaron unos bienhechores desde su fundación, pues regularmente los demás enfermos que se reciben, son atendidos con las limosnas de los fieles y la asistencia de los Religiosos. Los Militares pagan sus estancias correspondientes a la Hospitalidad, y me consta que con esta corta contribución son alimentados con sus sopas de pan, arroz, ración de carnero y medicina, según lo demanda la enfermedad de cada uno, y si exige separación se le pone en una de las Salas. Esta Villa está en la mejor situación para un Hospital Militar y por tanto V.S., como que ha visto su situación y ventajas que pueden resultar de la R.I. Hacienda, esforzará sus respectos informando lo que crea conveniente en la materia....”.

jueves, 14 de julio de 2016

Medidas de salud para la Villa de Aguascalientes. Siglo XVII.

Prohibición del comercio y venta de vinos, mezcales y otros brebajes:
Xavier A. López y de la Peña.
El Capitán Don Pedro de Salazar y Águila, Alcalde Mayor y de la Santa Hermandad en ella, Provincia de Juchipila y sus jurisdicciones por su Majestad, digo: Que por quanto por auto de Gobierno que proveí por razón de buena administración de justicia, que se publicó en la Plaza Pública de esta Villa el año pasado del noventa y uno, se prohíbe el que ninguno de los vecinos de esta Villa y su jurisdicción hayan, tengan ni vendan ningún género de vinos de cocos, mexcales ni otros brebajes, por ser como son nocivos a la república y de su comercio se siguen crecidos daños, embriagueces y enfermedades, y teniendo noticia que en contra de dicho auto algunos vecinos lo han vendido con pretexto de decir es mexcali para sanidad de los vecinos, y estos que son Simón Ramírez, Alonso Ruiz de Escamilla, Cristóbal de Molina Don Joseph Muñatones y Nicolás Alonso, a los cuales se les notifique no hayan, ni tengan para efecto alguno, ningún género de vinos ni brebajes, excepto el de Castilla y Parras, con pretexto ni motivo alguno, y si acaso tuvieren de presente alguno, dentro de veinte y cuatro horas siguientes los saquen fuera de la Villa, pena de veinte y cinco pesos, que aplico por mitad Real Cámara y reparos de la cárcel de esta Villa, en que desde luego los declaro por incursos y pasaré a derramarles el vino que hallare dentro de las dichas sus casas.
Fecho en Aguascalientes, en dieciséis días del mes de mayo de mil seiscientos y noventa y dos años. Po. de Salazar y Águila. Por mdo. de su merd. Antto. Pérez Velasco.- Ssno. Público. Rúbricas.

miércoles, 1 de junio de 2016

El efecto curativo de las aguas termales de Aguascalientes. 1803

Xavier A. López y de la Peña
Félix María Calleja Bruder Losada Campaño y Montero de Espinosa (1753-1828), destacado militar y político español, que ocupara el cargo de 2o. Jefe Político Superior de la Nueva España en marzo de 1813 y 60º virrey de la misma de 1814 a 1816 durante la Guerra de Independencia de México; se distinguió por sus métodos expeditivos y punitivos contra la insurgencia, a la que prácticamente desarticuló, tanto antes de ocupar el cargo de virrey, como al frente de éste.
Refiriéndose con serios trastornos en su salud, solicita una licencia a sus superiores para acudir al beneficio de las aguas termales de Aguascalientes, de la siguiente manera:
Excelentísimo Señor.
Mis enfermedades me han conducido al extremo de no poder desempeñar las funciones de mi empleo, y probablemente me conducirán al último si no trato de reparar mi salud enteramente arruinada por todos los medios que dicta la prudencia y la necesidad, si la voluntad de V. E. tiene a bien concederme cuatro meses de licencia para pasar a los baños termales de la Cantera en las proximidades de AguasCalientes, y aún a esa corte en busca de facultativos si ellos no bastaren.
La Brigada puede quedar en los mismos términos en que quedó el año de 800 cuando para pasar Revista a los Regimientos Veteranos me separé de ella nueve meses sin embargo de estar en guerra.
Las Provincias internas están tranquilas, y si durante ese tiempo hubiese ocurrencia que haga precisa mi asistencia desde cualquier paraje en que me halle, acudiré a sacrificar el último resto de mi salud en servicio del Soberano.
Dios guarde a V. E. muchos años. San Luis Potosí , 4 de noviembre de 1803. Excelentísimo Señor
Félix Calleja.

lunes, 2 de mayo de 2016

Un aguascalentense, pionero de la Cruz Roja en México.

El Dr. Manuel Gómez Portugal Guinchard.
Xavier A. López y de la Peña
Una vez que el Gobierno Mexicano reconociera a través del Decreto Presidencial publicado en el Diario Oficial de la Federación el 21 de agosto de 1907 el Convenio de Ginebra, Suiza, o con más precisión, la “Convención para mejorar la suerte de los heridos y enfermos de los ejércitos en campaña”; esto es la Cruz Roja, el presidente de la república Gral. Porfirio Díaz nombra una comisión que se encargue de organizar las bases en las que habría de operar la Cruz Roja en México. Dicha comisión quedó integrada por el Dr. Fernando López y Sánchez Román para los aspectos médico-sanitarios, el Lic. Joaquín Casasus para los asuntos legales y al Gral. Manuel Mondragón para las relaciones con el ejército .
El Dr. Fernando López que a la sazón se desempeñaba como director del Hospital General de México, llamó a colaborar en esta empresa a los doctores Leopoldo Calvillo, Alfonso Cabrera, Jesús Sola y Manuel Gómez Portugal Guinchard , todos ellos trabajadores en el mismo nosocomio. No sabemos qué tanto o en qué forma participaron los médicos mencionados en la integración de esta empresa, pero es claro que todos ellos, incluido el aguascalentense Dr. Manuel Gómez Portugal Guinchard (1884-1920) formaron una memorable parte de los precursores de la Cruz Roja en México.
Recordamos que el 18 de abril de 1911 éste médico, ya de regreso a su tierra natal utilizó por primera vez por vía intravenosa el famoso remedio del Dr. Paul Ehrlich (1854-1915), llamado “compuesto 606” (arsfenamida) en un joven de 21 años en el Hospital “Miguel Hidalgo” para el tratamiento de la sífilis o “avería con buenos resultados .
Gracias al empeño de estos y otros primeros voluntarios, y particularmente al tesón y entrega de la señora Luz González Cosío, esposa del Dr. Fernando López, se vieron coronados sus esfuerzos cuando el Gral. Porfirio Díaz expide el Decreto Presidencial No. 401 con fecha de 21 de febrero de 1910, en que se le da reconocimiento oficial a la Cruz Roja Mexicana, aunque en sus estatutos se le denominaba la Asociación Mexicana de la Cruz Roja; este decreto entra en vigor con su publicación en el Diario Oficial de la Federación el 12 de marzo del mismo año y el 26 de abril es nombrada la primera mesa directiva oficial .

viernes, 1 de abril de 2016

Rosa Padilla. Primera profesora de obstetricia en Aguascalientes. 1884.

Rosa Padilla. Primera profesora de obstetricia o partera en Aguascalientes.
Xavier A. López y de la Peña
Recordamos que se debe al Dr. Manuel Gómez Portugal Rangel, director del Hospital civil de Aguascalientes en 1881, la puesta en marcha de la primer sala de maternidad hospitalaria en el Estado (véase en este Blog: Primer sala... 02/10/2015). Así como también del primer curso para parteras en la entidad con una duración de dos años.
Hasta ahora no conocemos qué personas se inscribieron y siguieron estos cursos, sin embargo, es posible que una de ellas hubiera sido la señorita Rosa Padilla, originaria de Guanajuato, ya que el día 10 de marzo de 1884 refiere que habiendo hecho estudios de obstetricia, solicita a las autoridades locales ser examinada para poder ejercer ésta profesión.
Más adelante el 17 del mismo mes se informa que la señorita Padilla fue sometida a examen y resultó aprobada por unanimidad. Para este examen fungieron como sinodales los doctores Jesús Díaz de León Ávila, Francisco C. Maldonado y Francisco C. Macías, además del farmacéutico Alcibíades González.
Constituye entonces la primera partera o profesora de obstetricia formada, titulada y registrada en la entidad.

miércoles, 2 de marzo de 2016

Salubridad e higiene en Aguascalientes. Siglo XVII.

Sobre Salubridad e Higiene en Aguascalientes.
Xavier A. López y de la Peña.
Ante la preocupación de las autoridades de la villa de Aguascalientes por la disposición y uso adecuado del agua que para la población surtía el manantial ubicado en el oriente, así como para el manejo adecuado de la basura, en el año de 1680 el Alcalde Mayor de Aguascalientes, Francisco Tello de Lomas, refirió lo siguiente:
“…será muy útil que la acequia principal que entra por la calle del señor San Diego (hoy Rivero y Gutiérrez) se ahonde, para que teniendo caja suficiente no tenga tantos derrames y se pongan algunos puentes de maderos gruesos para que no los hurten, y que asimismo, ninguna persona sea osada de lavar ningún género de ropa en la parte superior de dicha acequia, por el riesgo tan urgente que pueda acontecer de apestarse toda la Villa con inmundicias que se lavan en dicha acequia, por ser como es, verosímil, que todos los vecinos de ella cogen agua para beber. Y que las personas que de dicha acequia sacaren agua para las huertas y servicios de sus casas, la lleven por conductos limpios y fortalecidos para que no se derrame tanta agua como al presente se experimenta, y no se hagan tantos lodazales como hay en las calles principales, y de la suerte de las ciudades empedradas es costumbre que se aderecen a costa de los dueños, así, en esta Villa, se podrá mandar que los que llevan agua como los vecinos, por donde pasa, tengan cuidado de aderezar la parte que les perteneciere y que tomada el agua que han de menester, no la echen a la calle, sino que la pasen a la casa del vecino, para que yendo de casa en casa ha de ir limpia, sin inmundicias de sabor ni de otra cosa y para que pueda servir sin riesgo a su salud”.
“Que no se hagan montones de basura en las calles públicas y que los que de presente hay los quiten los vecinos, y que no se consientan andar por las calles los ganados de cerda, so pena que si los dueños no los recogen y encierran, los puedan matar los vecinos, sin que por ello estén obligados a los pagos, pues es notorio que se hacen en las acequias”.

lunes, 8 de febrero de 2016

Labio y paladar hendido en Aguascalientes. 1622.

Labio y paladar hendido en Aguascalientes. Primera descripción, 1622.
Xavier A. López y de la Peña.
La malformación congénita conocida como labio y paladar hendido, vulgarmente "labio leporino", viene del vocablo latín lepus, leporis; 'liebre'. Esto es «labio de liebre», pues ese animal tiene el labio superior cortado en el medio. El labio fisurado (queiloquisis) y el paladar hendido (palatosquisis) también se pueden desarrollar juntos y son variaciones de un tipo de deformidad congénita causada por el anormal desarrollo facial durante la gestación.
Desde la mágico-religiosa cosmovisión prehispánica, la presencia de algunos animales o acontecimientos inesperados podía augurar que alguien iba a enfermar o morir. De la misma manera, algunos fenómenos naturales como los eclipses de sol o de luna podían provocar que las madres dieran a luz a sus hijos con algún defecto, como podrían ser con los labios “mellados y cortados” (labio leporino). En náhuatl al eclipse de sol se le llama Tonatiuh icualocatl (“comedura del Sol”), y el eclipse de luna se dice Metztli icualocatl (“comedura de Luna”).
Aun hoy una amplia variedad de estas concepciones se encuentran vigentes en variadas sociedades mexicanas. Sobresalen aquellos asociados con fenómenos lunares, de los cuales el más común es el eclipse. Así, se cree que la mujer embarazada expuesta a él provocaría que su hijo naciese con labio leporino, con cuerpo de ratón, con la nariz “comida”, boquituerto, o con ojos bizcos entre otras deformidades.
Para impedir que eso pasara se ponían una navaja de obsidiana en la boca o sobre el vientre para defender al feto de la mala influencia del eclipse. Ahora entre otras muchas, las mujeres se suelen amarrar un listón rojo en la cintura sujetado con un espejo o una moneda.
En Aguascalientes se tiene la siguiente noticia del primer reporte del nacimiento de una niña con labio y paladar hendido:
El 20 de junio de 1622 nació “Nicolaza, hija de Juan Valdéz Macías y de Isabel de la Asunción, vecinos de esta villa. Padrinos Andrés de Alvarado y Juana de Alvarado su mujer, vecinos de esta villa. Padrino al echar el agua, Juan Arias de Avella y Valdéz. Bautisose el miércoles santo de este presente año, por haber nacido con medio labio de arriba, contaron el 23 de marzo de 1622.”

jueves, 7 de enero de 2016

Medicina Dosimétrica en Aguascalientes. 1899

Fugaz presencia de la Medicina Dosimétrica en Aguascalientes.
Xavier A. López y de la Peña.
En México y durante el período llamado "porfiriato" se debatieron varias teorías médicas acerca de la enfermedad y su terapéutica. Al lado de la alopatía y la homeopatía surgió la medicina dosimétrica impulsada por el médico y biólogo belga, Adolph Burggraeve (1806-1886).
Esta teoría se abrió paso en México a través de la revista La Medicina Científica, impulsada por los doctores Fernando Malanco y Juan F. Fenelón. Esta teoría enfatiza evitar los efectos secundarios provocados por la alopatía, particularmente por altas las dosis de medicamentos que se suelen prescribir y recomendando entonces utilizar sólo elementos puros y en dosis pequeñas y muy precisas.
El procedimiento médico requería, en primer término, la aplicación de un purgante para limpiar las vías digestivas y propiciar la inmediata absorción de los fármacos, mediante la administración de los gránulos llamados de Sedlitz Chanteaud (sulfato de magnesia, preparación elaborada por el farmacéutico, Antoine Charles Chanteaud (1833-1905), director del Instituto de Medicina Dosimétrica de París.
La medicina dosimétrica tuvo una vida efímera en el mundo y aquí en México también (alrededor de 15 años), frente al embate opositor de la medicina alopática abanderada por médicos de la Academia de Medicina.
En Aguascalientes se cuenta con una breve aparición de la medicina dosimétrica, misma que quedó registrada en el inventario de la botica del Hospital Civil elaborado por el encargado de la misma, Juan N. Marín y con el Vo. Bo. de su director, el Dr. Manuel Gómez Portugal Rangel, con fecha 23 de junio de 1899. No conozco ningún comentario sobre este tipo de medicina hecho por algún médico de la época, incluso de la capacidad y sapiencia que alcanzaban algunos de ellos, como la del doctor Jesús Díaz de León Ávila y la del propio director del Hospital Civil, el referido Dr. Manuel Gómez Portugal Rangel.
En seguida damos cuenta de algunos de los 50 productos dosimétricos adquiridos para la botica del Hospital Civil a instancias de su progresista director, el Dr. Manuel Gómez Portugal Rangel.
3 cajas Gránulos dosimétricos de Hyosciamina.
5 cajas Gránulos dosimétricos de Arseniato de fierro.
2 cajas Gránulos dosimétricos de Fosfuro de zinc.
3 cajas Gránulos dosimétricos de Sulfuro de calcio.
3 cajas Gránulos dosimétricos de Digitalina.
3 cajas Gránulos dosimétricos de Valerianato de quinina.
3 cajas Gránulos dosimétricos de Ácido salicílico.
2 cajas Gránulos dosimétricos de Veratrina.
2 cajas Gránulos dosimétricos de Ácido tánico.
2 cajas Gránulos dosimétricos de Benzoato de amoníaco.
3 cajas Gránulos dosimétricos de Arseniato de estricnina.